Es curioso como las cosas surgen a veces por una mezcla de necesidad, oportunidad y una pizca de suerte. Una alquimia incomprensible que gesta proyectos desde la nada. Así empieza la historia de Estudia. Primero por la necesidad de saciar un inconformismo y una gran desazón con el sistema educativo actual, algo que he gestado y madurado durante años e infinidad de sobremesas junto a mis antiguos compañeros de facultad, hoy amigos, muchos de ellos docentes. También por la necesidad de dar un giro de timón al barco de mi vida, ese timón que a veces es tan difícil de girar, buscando un rumbo que llene las velas de mi realización personal. Y, como siempre, por mi necesidad innata de nuevos proyectos, bien sabida por los que mejor me conocen.
No hay comentarios